El fluoruro es el agente más eficaz disponible para ayudar a prevenir la caries dental. Es un mineral que está presente de forma natural en cantidades variables en casi todos los alimentos y suministros de agua. Los beneficios del fluoruro se conocen desde hace más de 50 años y cuentan con el respaldo de muchas organizaciones profesionales y de la salud.
El fluoruro actúa de dos formas:
El fluoruro tópico fortalece los dientes una vez que han salido al filtrarse en la superficie exterior del esmalte dental, haciendo que los dientes sean más resistentes a las caries. Obtenemos fluoruro tópico mediante el uso de productos dentales que contienen flúor, como pasta de dientes, enjuagues bucales y geles. Los dentistas e higienistas dentales generalmente recomiendan que los niños tengan una aplicación profesional de fluoruro dos veces al año durante los chequeos dentales.
El fluoruro sistémico fortalece los dientes que han erupcionado y los que se están desarrollando debajo de las encías.Obtenemos fluoruro sistémico de la mayoría de los alimentos y de los suministros de agua de nuestra comunidad. También está disponible como suplemento en forma de gota o gel y puede ser recetado por su dentista o médico. Generalmente, las gotas de fluoruro se recomiendan para bebés y las tabletas son más adecuadas para niños hasta la adolescencia. Es muy importante controlar las cantidades de fluoruro que ingiere un niño. Si se consume demasiado fluoruro mientras se desarrollan los dientes, puede producirse una afección llamada fluorosis (manchas blancas en los dientes).
Aunque la mayoría de las personas reciben fluoruro de los alimentos y el agua, a veces no es suficiente para ayudar a prevenir las caries. Su dentista o higienista dental puede recomendar el uso de tratamientos con fluoruro en el hogar y / o profesionales por las siguientes razones:
- Fosas y fisuras profundas en las superficies de masticación de los dientes.
- Superficies radiculares expuestas y sensibles.
- Hábitos de higiene bucal aceptables o deficientes.
- Ingesta frecuente de azúcares y carbohidratos.
- Exposición inadecuada a fluoruros.
- Flujo de saliva inadecuado debido a condiciones médicas, tratamientos médicos o medicamentos.
- Historia reciente de caries dental.
Recuerde, el fluoruro por sí solo no previene la caries dental. Es importante cepillarse los dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental con regularidad, comer comidas balanceadas, reducir los refrigerios azucarados y visitar a su dentista con regularidad.